Creado en colaboración con el Helpdesk sobre Empresas y Derechos Humanos

Salario digno

Alrededor del 15 % de los/as asalariados/as reciben menos del salario mínimo, lo que provoca ciclos de pobreza endémica entre los trabajadores con empleo remunerado pero con una remuneración insuficiente.

Resumen

¿Qué es el salario digno?

Si bien no existe una definición universalmente aceptada de salario digno como concepto o cantidad universalmente aceptada que defina dicha remuneración, casi todas las descripciones y definiciones de salario digno incorporan la idea de que un salario digno es «la remuneración percibida por una semana laboral regular por un/a trabajador/a en un lugar en particular suficiente para permitir un nivel de vida digno para el/la trabajador/a y sus dependientes. Los elementos de un nivel de vida digno incluyen alimentos, agua, vivienda, educación, asistencia médica, transporte, ropa y otras necesidades esenciales, incluidas provisiones para hechos inesperados». Esta definición ha sido acordada por la Global Living Wage Coalition (Coalición Mundial por el Salario Digno). La iniciativa SDG Ambition por el salario digno del Pacto Mundial de las Naciones Unidas insta a las empresas a pagar a todos/as sus empleados/as un salario digno, independientemente de su situación laboral.

¿Por qué referirse a salarios dignos y no a salarios mínimos?

En principio, los salarios mínimos establecen un límite salarial para todos los/as trabajadores/as, con el fin de garantizar sus necesidades básicas y las de sus familias. Los salarios mínimos deben fijarse mediante el diálogo social entre las organizaciones patronales y de trabajadores/as, con el fin de tener en cuenta tanto las necesidades de los/as trabajadores/as y sus familias como el nivel general de los salarios en el país, el coste de la vida, las prestaciones de la seguridad social, y los niveles de vida relativos de otros grupos sociales. Los salarios mínimos constituyen una herramienta aproximada, que establece el mismo estándar, con independencia de la capacidad de pago de la empresa. Suelen aplicarse en todas las áreas geográficas (a pesar de las diferencias en el coste de la vida) y en todos los sectores (con independencia de los márgenes de beneficio de un sector concreto). En este sentido, están concebidos para complementarse con convenios colectivos que pueden optimizar los salarios con arreglo a las características de determinados sectores, regiones geográficas y empresas (por ejemplo, productividad y competitividad).

La presión por un salario digno es una respuesta al hecho de que los salarios mínimos a menudo no satisfacen las necesidades de los/as trabajadores/as debido a alguno de los siguientes factores:

  • El salario establecido no tiene en cuenta en primer lugar las necesidades básicas de los/as trabajadores/as y sus familias, normalmente porque el Gobierno no ha consultado a los representantes de los/as trabajadores/as.
  • El salario mínimo no se ajusta mediante la negociación colectiva.
  • No se aplica.
  • No se ajusta con la frecuencia suficiente para mantenerse al día con la inflación, lo que da lugar a la erosión salarial.

Cuando los salarios mínimos son sectoriales, la brecha salarial de género también puede influir en unos salarios mínimos excesivamente bajos en sectores en los que predominan las mujeres, como el de la confección. A menudo existe la presunción sesgada de que son los hombres los que sostienen a sus familias, mientras que las mujeres simplemente complementan los ingresos familiares y, por tanto, no es necesario pagarles tanto.

Un salario digno se determina en función del coste medio de la vida y depende de las hipótesis relativas al tamaño de la familia y al número de asalariados/as. El importe necesario para ofrecer un salario digno depende de lo que se incluya y asuma en el cálculo.

¿Cuál es el Dilema?

¿Cómo puede una empresa garantizar que a los/as trabajadores/as de sus propias operaciones y cadenas de suministro se les pague un salario digno, especialmente cuando los países no tienen un salario mínimo legal, o cuando el salario mínimo no ofrece un nivel de vida digno para un/a trabajador/a y su familia?

Prevalencia de salarios dignos

La Organización Internacional del Trabajo (OIT) estima que el 90 % de los Estados miembros cuenta con legislación en materia de salario mínimo, y con algún tipo de salario mínimo para los/as trabajadores/as. Sin embargo, en algunos casos, los salarios mínimos no permiten un nivel de vida digno. Por otra parte, se estima que 266 millones de asalariados/as en todo el mundo perciben un salario inferior al salario mínimo, lo que representa el 15 % del total de los/las asalariados/as. Esto pone de manifiesto que, incluso cuando existen leyes sobre el salario mínimo, es posible que no se apliquen adecuadamente, o que excluyan a algunas categorías de trabajadores/as de la cobertura legal (como los/as trabajadores/as de la agricultura que no tienen derecho al salario mínimo).

La pandemia de COVID-19 ha tenido un impacto significativo en los salarios en todo el mundo, y dos tercios de los países experimentaron una presión a la baja sobre el nivel o la tasa de crecimiento de los salarios medios, de acuerdo con las estimaciones de la OIT. Las mujeres se han visto afectadas por las reducciones salariales en mucha mayor medida que los hombres debido a la crisis mundial de la COVID-19.

En enero de 2021, los Países Bajos y Alemania firmaron una declaración conjunta en la que declaraban su compromiso de promover unos ingresos y salarios dignos. La declaración insta a las empresas a cumplir con su diligencia debida en materia de derechos humanos, lo que incluye promover la importancia de tener un salario mínimo adecuado que cubra suficientemente los costes de la vida.

Argumentos económicos en favor de un salario digno

La ausencia de un salario digno en las cadenas de suministro no solo es contraria a los valores de muchas empresas, sino que también contrarresta los esfuerzos por garantizar cadenas de suministro sostenibles y responsables y asegurar el crecimiento de los mercados de consumo. Por otra parte, a medida que más empresas se comprometen públicamente a mantener salarios dignos, los inversores y los grupos de interés prestan cada vez más atención a esta cuestión, lo que a su vez aumenta la necesidad de que las empresas cumplan este compromiso.

Aunque garantizar el pago de salarios dignos en las cadenas de suministro suele considerarse un coste, puede constituir una inversión importante. Al margen del cumplimiento un deber de asistencia, garantizar el pago de salarios dignos a los/as trabajadores/as de la cadena de suministro se traduce en una inversión en capital humano que puede aportar una serie de beneficios. Las siguientes consideraciones presentan los argumentos para que las empresas tomen medidas en materia de salarios en sus cadenas de suministro:

  • Tanto las empresas como los proveedores pueden lograr beneficios empresariales integrando una política salarial fundamentada en una estrategia de sostenibilidad y competitividad más amplia: Las empresas pueden impulsar un suministro de calidad y lograr una gestión del riesgo más eficaz, así como beneficios para la reputación, promoviendo salarios dignos en sus cadenas de suministro. Por ejemplo, puede ser necesario consolidar y acortar las cadenas de suministro para mantener los esfuerzos en materia de salarios, pero con ello también pueden mejorar las relaciones comerciales y la resiliencia de la oferta. Los proveedores pueden beneficiarse de una reducción de la rotación del personal y del absentismo, de la reducción de los costes de formación, de la mejora de la productividad y la calidad de la producción, del acceso a mercados de mayor valor y una mejor reputación.
  • Lograr salarios dignos forma parte de la responsabilidad empresarial de respetar los derechos humanos fundamentales: Identificar el riesgo de una baja remuneración y actuar para mitigar o remediar este riesgo es una de las formas en que las empresas pueden alinearse con los Principios Rectores de las Naciones Unidas sobre las Empresas y los Derechos Humanos (Principios Rectores).
  • Las empresas pueden cumplir sus compromisos con una amplia gama de Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS): Muchas empresas se han comprometido a contribuir positivamente a los ODS. Al comprometerse a lograr salarios dignos en las cadenas de suministro, las empresas cumplen este compromiso y también crean mayores beneficios para el desarrollo sostenible y los derechos humanos.

Impacto sobre los derechos humanos

Los salarios de miseria afectan a numerosos derechos humanos,[1] incluidos, entre otros, los siguientes:

  • Derecho a disfrutar de unas condiciones de trabajo equitativas y satisfactorias (Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, artículo 7; Declaración Universal de los Derechos Humanos, artículo 23): Los elementos de este derecho se centran en el pago, los salarios y la provisión de una «vida digna».
  • Derecho de toda persona a un nivel de vida adecuado (Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, artículo 11; Declaración Universal de los Derechos Humanos, artículo 25): Los artículos establecen lo que la ONU considera factores de un nivel de vida adecuado, que incluye alimentos, ropa y vivienda adecuados. Este derecho también incluye el derecho a la mejora continua de las condiciones de vida de todas las personas y sus familias. Todos los elementos pueden verse afectados negativamente por unos salarios insuficientes.
  • Derecho al descanso y al disfrute del tiempo libre, incluida una limitación razonable de la duración del trabajo (Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, artículo 7; Declaración Universal de los Derechos Humanos, artículo 24): Cuando los salarios son insuficientes para ofrecer un nivel de vida adecuado, puede que los/as trabajadores/as tengan que trabajar un número excesivo de horas para complementar su renta básica. Esto podría afectar a la calidad de vida del/de la trabajador/a, dar lugar a una baja productividad, aumentar el riesgo de violaciones de la salud y la seguridad y afectar potencialmente a la salud física y mental.
  • Derecho a la protección de la familia (PIDESC, artículo 10, artículo 17 del PIDCP y artículo 23 de la DUDH): Las prácticas en el lugar de trabajo pueden obstaculizar la capacidad de un/a trabajador/a para adoptar un equilibrio saludable entre vida laboral y personal, también cuando los salarios son insuficientes para ofrecer un nivel de vida adecuado y los/as trabajadores/as se ven obligados a trabajar horas excesivas para complementar sus ingresos. El hecho de no percibir un salario digno puede afectar también a la capacidad del/de la trabajadora para proporcionar una atención adecuada a su familia, también en lo que respecta al cuidado de niños/as, la alimentación y la vivienda.
  • Derecho a la protección del niño (PIDESP, artículo 10.3 y artículo 24 del PIDCP, y artículo 25 de la DUDH): Unos salarios inadecuados pueden poner en peligro la capacidad de los progenitores para proporcionar la protección necesaria a sus hijos/as, incluida una alimentación, asistencia sanitaria y vivienda adecuadas. Puede tratarse de un problema especialmente grave en áreas en las que los sistemas públicos de protección a la infancia son deficientes o inexistentes.
  • Derecho a la salud (Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, artículo 12; Declaración Universal de los Derechos Humanos, artículo 25): Dado que es probable que muchos de los países en los que los salarios dignos constituyen un problema particular no tengan cuenten con sistemas de salud pública sólidos o de fácil acceso, es probable que unos salarios inadecuados repercutan en la salud de los/as trabajadores/as y sus familias. La asistencia sanitaria puede constituir una parte significativa de los ingresos de cualquier persona, y los/as trabajadores/as con salarios bajos se ven obligados a racionar los productos y servicios sanitarios que adquieren.

 

Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS)

La disposición de un salario digno permite directa e indirectamente varios ODS. En particular, los salarios son un acelerador para lograr los siguientes objetivos y metas:

Permite directamente:

  • Objetivo 1 («Poner fin a la pobreza en todas sus formas en todas partes»)
  • Objetivo 5 («Lograr la igualdad entre los géneros y empoderar a todas las mujeres y las niñas»)
  • Objetivo 8 («Promover el crecimiento económico sostenido, inclusivo y sostenible, el empleo pleno y productivo y el trabajo decente para todos»), Meta 8.8: Proteger los derechos laborales y promover un entorno de trabajo seguro y sin riesgos para todos los/as trabajadores/as, incluidos los migrantes, en particular las mujeres migrantes y las personas con empleos precarios
  • Objetivo 10 («Reducir la desigualdad en y entre los países»), Meta 10.4: adoptar políticas, especialmente fiscales, salariales y de protección social, y lograr progresivamente una mayor igualdad

Permite indirectamente:

  • Objetivo 2 («Poner fin al hambre, lograr la seguridad alimentaria y una mejor nutrición y promover una agricultura sostenible»)
  • Objetivo 3 («Garantizar la vida sana y promover el bienestar para todos en todas las edades»)
  • Objetivo 4 («Garantizar una educación inclusiva, equitativa y de calidad y promover oportunidades de aprendizaje durante toda la vida para todos»)
  • Objetivo 6 («Garantizar la disponibilidad y la gestión sostenible del agua y el saneamiento para todos»)
  • Objetivo 7 («Garantizar el acceso a la energía asequible, fiable, sostenible y moderna para todos»)
  • Objetivo 9 («Construir infraestructuras resilientes, promover la industrialización inclusiva y sostenible y fomentar la innovación»)
  • Objetivo 11 («Lograr que las ciudades y los asentamientos humanos sean inclusivos, seguros, resilientes y sostenibles»)
  • Objetivo 17 («Fortalecer los medios de ejecución y revitalizar la alianza mundial para el desarrollo sostenible»)

Recursos clave

Los siguientes recursos ofrecen más información sobre el modo en que las empresas pueden ofrecer y fomentar salarios dignos en sus operaciones y cadenas de suministro:

  • Pacto Mundial de las Naciones Unidas, Achieving the Living Wage Ambition: Hoja de referencia y orientación para la aplicación:La SDG Ambition del Pacto Mundial de las Naciones Unidas sobre el salario digno ofrece detalles ilustrativos sobre las medidas que deben adoptarse para aplicar con éxito un programa de salario digno y garantizar que el 100 % de los/as empleados/as de toda la organización percibe un salario digno.
  • Pacto Mundial de las Naciones Unidas, Improving Wages to Advance Decent Work in Supply Chains (Mejorar los salarios para promover el trabajo decente en las cadenas de suministro): Este micrositio webinteractivo pone de relieve las lecciones aprendidas y las mejores prácticas de empresas y organizaciones para abordar la baja remuneración en las cadenas de suministro, y proporciona directrices sobre medidas concretas que las empresas y sus proveedores pueden tomar para mejorar los salarios a escala mundial.
  • Pacto Mundial de las Naciones Unidas, Herramienta de análisis de salario digno: esta herramienta en línea gratuita, fácil de usar y estrictamente confidencial ayuda a las empresas a identificar acciones y nuevas oportunidades para proporcionar un salario digno para garantizar que todos/as los/as trabajadores/as, familias y comunidades puedan vivir con dignidad.
  • IDH, Iniciativa de Comercio Sostenible, Roadmap on Living Wages (Hoja de ruta sobre salarios dignos): IDH está trabajando para garantizar salarios dignos a través de la Hoja de ruta sobre salarios dignos. El objetivo de esta plataforma es fortalecer la alineación internacional y generar soluciones tangibles en materia de salarios dignos.
  1. Al introducir la responsabilidad empresarial basada en la diligencia debida para respetar los derechos humanos, los Principios Rectores de las Naciones Unidas sobre las Empresas y los Derechos Humanos (Principios Rectores) desplazan la atención del impacto en las empresas al impacto en los derechos humanos. En el apartado «Consideraciones de diligencia debida» se incluye información adicional sobre los Principios Rectores.

Definicion e instrumentos jurídicos

Convenios de la OIT y de las Naciones Unidas

No existen leyes o convenios internacionales vigentes sobre el salario digno o el cálculo del salario digno. Los convenios existentes sobre el salario mínimo son los siguientes:

Aproximadamente la mitad de los Estados miembros han ratificado el Convenio n.º 95 de la OIT y más de 50 han ratificado el Convenio n.º 131 de la OIT. Los países que han ratificado uno o ambos convenios deberían disponer de instrumentos jurídicos adecuados para aplicarlos a escala nacional. No obstante, esto no garantiza que la protección legal de los/as trabajadores/as tenga la misma eficacia —o se aplique de igual manera— en todos los países.

Además de los convenios de la OIT, el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (ICESCR) también incorpora obligaciones del Estado que atañen a los salarios dignos. El artículo 7 establece que la remuneración debe proporcionar a los/as trabajadores/as una «vida digna para ellos y sus familias», incluido un «salario justo». Al detallar las obligaciones de los Estados en virtud de esta disposición, el Comité DESC ha subrayado que la noción de salario justo no es estática, señalando que «[e]n la clara mayoría de los/as trabajadores/as, los salarios justos están por encima del salario mínimo». Una vez más, los países que han ratificado el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales deben contar con medidas para aplicar este tratado internacional a nivel nacional.

En junio de 2022, la OIT adoptó una resolución en la 110.ª reunión de la Conferencia Internacional del Trabajo en la que pedía que se reforzara la cooperación para contribuir a una mejor comprensión de los salarios dignos y que se prestara asistencia a los Estados miembros que lo solicitaran.

¿Salario digno o salario mínimo desde la óptica de la OIT?

Aunque no existen convenios de la OIT sobre el salario digno, podría sostenerse que dicho salario representa un reposicionamiento de la conceptualización del salario mínimo por parte de la OIT. En concreto, el Convenio n.º 131 de la OIT establece: «para determinar el nivel de los salarios mínimos deberían incluirse, en la medida en que sea posible y apropiado, de acuerdo con la práctica y las condiciones nacionales, los siguientes [elementos]:

  • las necesidades de los/as trabajadores/as y de sus familias habida cuenta del nivel general de salarios en el país, del costo de vida, de las prestaciones de seguridad social y del nivel de vida relativo de otros grupos sociales;
  • los factores económicos, incluidos los requerimientos del desarrollo económico, los niveles de productividad y la conveniencia de alcanzar y mantener un alto nivel de empleo».

Asimismo, la Declaración tripartita de principios sobre las empresas multinacionales y la política social (Declaración EMN) establece que los salarios deben: proporcionar los salarios, prestaciones y condiciones de trabajo mejores posibles. Los elementos que deberían tomarse en consideración son, entre otros:

  • las necesidades de los/as trabajadores/as y de sus familias, habida cuenta del nivel general de los salarios en el país, del costo de vida, de las prestaciones de seguridad social y del nivel de vida relativo de otros grupos sociales; y
  • los factores económicos, incluidos los requerimientos del desarrollo económico, los niveles de productividad y la conveniencia de alcanzar y mantener un alto nivel de empleo».

Asimismo, el término «salario vital» figura en el preámbulo de la Constitución de la OIT adoptada en 1919:

«Considerando que existen condiciones de trabajo que entrañan tal grado de injusticia, miseria y privaciones para gran número de seres humanos, que el descontento causado constituye una amenaza para la paz y armonía universales; y considerando que es urgente mejorar dichas condiciones, por ejemplo, en lo concerniente a reglamentación de las horas de trabajo, fijación de la duración máxima de la jornada y de la semana de trabajo, contratación de la mano de obra, lucha contra el desempleo, garantía de un salario vital adecuado, protección del trabajador contra las enfermedades, sean o no profesionales, y contra los accidentes del trabajo, protección de los niños, de los adolescentes y de las mujeres, pensiones de vejez y de invalidez, protección de los intereses de los trabajadores ocupados en el extranjero, reconocimiento del principio de salario igual por un trabajo de igual valor y del principio de libertad sindical, organización de la enseñanza profesional y técnica y otras medidas análogas».

Esta cita también destaca la importante cuestión de contextualizar el salario en el marco más amplio de las condiciones de trabajo y protección social. Qué constituye un salario digno en ausencia de protección social y un mayor riesgo de lesión, desempleo, pérdida de ingresos, horas necesarias para alcanzar un salario digno, etc., será muy diferente dependiendo de cada una de estas variables.

Otros instrumentos jurídicos

Los Principios Rectores de las Naciones Unidas sobre las Empresas y los Derechos Humanos establecen la norma mundial relativa a la responsabilidad de las empresas de respetar los derechos humanos en sus operaciones y en el conjunto de sus cadenas de valor. Los Principios Rectores instan a los Estados a considerar una combinación inteligente de medidas (nacionales e internacionales, obligatorias y voluntarias) para fomentar el respeto de los derechos humanos por parte de las empresas.

Legislación nacional

Las empresas están cada vez más sujetas a obligaciones de presentación de información no financiera y diligencia debida en las jurisdicciones en las que operan, que suelen incluir información sobre su desempeño. Existen varios ejemplos destacados de legislaciones nacionales que imponen específicamente la presentación de informes relacionados con los derechos humanos y otras obligaciones jurídicas positivas, como la Ley de Esclavitud Moderna de Reino Unido de 2015, la Ley de Esclavitud Moderna de Australia de 2018, la Ley de Transparencia en las Cadenas de Suministro de California de 2010, la Ley del Deber de Vigilancia Corporativa de Francia de 2017, la Ley alemana sobre las Obligaciones de Diligencia Debida corporativa en las Cadenas de Suministro de 2021 y la Ley noruega de Transparencia de 2022.

Asimismo, en 2021 los Países Bajos presentaron un Proyecto de Ley de Conducta Empresarial Internacional Responsable y Sostenible, y la Comisión Europea anunció su Directiva sobre diligencia debida de las empresas en materia de sostenibilidad (CSDDD). Es probable que esta Directiva entre en vigor entre 2025 y 2027 y hará obligatoria la diligencia debida en materia de derechos humanos y medio ambiente para las empresas de mayor tamaño. De manera crucial, el proyecto de Directiva CSDD de la UE posiciona la salvaguarda explícita de «salarios dignos adecuados», afirmando que las empresas deben garantizar un salario digno adecuado, incluso en sus cadenas de suministro. En mayo de 2022, un colectivo de 64 empresas, inversores e iniciativas publicó una carta de promoción en apoyo de esta disposición, en la que instaba a la UE y a los Estados miembros a garantizar que los salarios dignos y los ingresos dignos se incluyan como un derecho humano en la Directiva final.

Estas leyes de divulgación obligatoria y diligencia debida exigen que las empresas comuniquen públicamente sus esfuerzos para abordar los impactos reales y potenciales sobre los derechos humanos, incluida la privación de un salario digno adecuado. El incumplimiento de estas obligaciones conlleva un riesgo jurídico real para las empresas.

Factores de riesgo contextuales

Hay muchos factores de riesgo que contribuyen a unos niveles salariales muy bajos para los/as trabajadores/as, entre los que figuran los siguientes:

  • La inexistencia de leyes sobre el salario mínimo y los intentos de algunos gobiernos por mantener los salarios bajos para que sean competitivos para las empresas internacionales significa que los salarios bajos son la norma para muchos/as trabajadores/as. Las legislaciones relativas a los salarios mínimos y la remuneración no garantizan que se proporcionen salarios dignos.
  • Un cumplimiento deficiente de la legislación laboral, por ejemplo, las leyes relativas a salarios, remuneración y horas de trabajo, puede dar lugar a que los salarios en su conjunto sean inadecuados.
  • Los altos niveles de desempleo debilitan la capacidad de negociación de los/as trabajadores/as y puede dar lugar a que acepten empleos con salarios que no son adecuados para ellos/as o sus familias con el fin de tener algún tipo de ingreso.
  • Altos niveles de informalidad: si las empresas operan en la economía informal o están legalmente registradas pero contratan trabajadores/as de manera informal, sus trabajadores/as corren un riesgo mucho mayor de percibir salarios muy bajos y, en la mayoría de los casos, no recibir un salario digno.
  • La pobreza generalizada en un país o región puede contribuir a los bajos salarios, ya que las empresas pueden aprovechar el bajo nivel de ingresos de la zona y pagar menos a los/as trabajadores/as.
  • La falta de seguridad social y de prestaciones no monetarias, como la falta de acceso a servicios de cuidado infantil o atención sanitaria asequibles, aumenta el gasto de los/as trabajadores/as, reduciendo así la proporción de sus salarios que pueden gastarse en otros artículos como alimentos, vivienda, educación, transporte o actividades de ocio.
  • Los altos niveles de desigualdad dentro de una región pueden contribuir a salarios bajos o inestables, ya que los salarios promedio pueden parecer adecuados, pero los que se encuentran en el extremo inferior del espectro salarial están en desventaja.
  • Las asimetrías de poder e información en las cadenas de suministro mundiales significan que los proveedores suelen tener menos opciones y menos flexibilidad en la toma de decisiones que sus compradores. En las últimas cuatro décadas, una transición relativamente rápida al aprovisionamiento mundial ha hecho que las cadenas de suministro dependan de un modelo de negocio que se beneficia del mantenimiento de salarios bajos y de una regulación y aplicación inadecuadas.
  • La existencia de redes de suministro complejas y dispares con múltiples intermediarios y empresas que adquieren a un único proveedor exige un alto grado de coordinación del comprador para abordar los salarios. También suscita preocupación que dicha coordinación infrinja las leyes de defensa de la competencia. La complejidad de tales redes refleja los desafíos potenciales de garantizar un salario digno.
  • El diálogo social, incluida la negociación colectiva, no se utiliza eficazmente en todas partes, lo que significa que los/as trabajadores/as pierden una forma importante de aumentar los salarios. El diálogo social es fundamental para garantizar que el salario se ajuste a las necesidades tanto de los/as trabajadores/as como de las empresas proveedoras. El diálogo social también es vital para mantener los salarios actualizados en función de la inflación y los cambios en las circunstancias económicas.

Factores de riesgo específicos del sector

La pobreza laboral causada por los bajos salarios es un problema mundial y prevalece en muchos sectores diferentes. Los dos sectores que figuran a continuación se han seleccionado como ejemplos, ya que se dispone de muchos estudios y acciones que las empresas de estos sectores pueden adoptar para mejorar los salarios de sus empleados/as y los/as trabajadores/as de la cadena de suministro. Para identificar posibles riesgos en relación con los salarios bajos en otros sectores, las empresas pueden acceder a la Comprobación de riesgos de RSE.

Agricultura

El sector agrícola es vulnerable a los salarios de miseria de los/as trabajadores/as debido a la naturaleza estacional del trabajo, la alta prevalencia de trabajadores/as informales o ilegales y la naturaleza remota de gran parte del trabajo agrícola, que expone a los/as trabajadores/as a la explotación y los/as mantiene alejados/as de fuentes de reparación. Según la Global Living Wage Coalition (Coalición Mundial por el Salario Digno), los conceptos de «salario digno» e «ingresos dignos» son particularmente pertinentes a la hora de analizar el sector agrícola. Aunque se trata de lograr un nivel de vida digno para los hogares, la idea de salario digno se aplica en el contexto de los/as trabajadores/as contratados/as (en fábricas, en explotaciones agrícolas, etc.), mientras que los ingresos dignos se aplican al contexto de cualquier persona que obtiene ingresos, como los/as agricultores/as autónomos/as.

Existen numerosas campañas e iniciativas para promover tanto el salario digno como los ingresos dignos de los/as trabajadores/as agrícolas, como la Fundación Comercio Justo y la Living Income Community of Practice (Comunidad de Práctica de Ingresos Dignos).

Recursos útiles

  • Global Living Wage Coalition, Implementation (Implementación): Una serie de estudios y herramientas para industrias agrícolas, incluidos productos específicos como el té y el plátano.
  • Rainforest Alliance, Living Wage Position Paper — Sustainable Livelihoods: lograr salarios dignos para los/as trabajadores/as agrícolasorientación e información para empresas agrícolas sobre el pago de un salario digno en el conjunto de la cadena de suministro.
  • Fair Labor Association (FLA), Fair Compensation for Farmworkers: Emerging Good Practices and Challenges (Remuneración equitativa para los/las trabajadores/as agrícolas: buenas prácticas y nuevos retos): este informe examina las tendencias relacionadas con la remuneración sobre la base de las visitas a explotaciones agrícolas de la FLA (Asociación de Comercio Justo) y tiene por objeto ayudar a las marcas multinacionales a comprender mejor los salarios pagados a los/as trabajadores/as de las explotaciones agrícolas a las que compran productos.
  • NewForesight, Driving Improvements in Wages and Working Conditions in the Tea Sector (Propiciar mejoras salariales y en las condiciones de trabajo en el sector del té): Este informe, elaborado en el marco de un proyecto de la OIT, incluye estudios sobre el plátano, el té y el café.
  • Fairtrade International, Guía para organizaciones de pequeños agricultores: implementación de la diligencia debida en materia de derechos humanos y medio ambiente (HREDD): esta guía se desarrolló para proporcionar asesoramiento y herramientas sobre HREDD para que las organizaciones de agricultores las implementen.


Moda, confección y textil

Tradicionalmente, se ha señalado a esta industria como una industria donde se producen muchas violaciones de los derechos humanos y laborales, incluidos salarios bajos o retención de salarios. Debido a la COVID-19, en 2020 y 2021, muchos/as trabajadores/as del sector textil han percibido salarios reducidos debido a pedidos cancelados o, en algunos casos, no se les ha pagado nada. En respuesta a estos riesgos, el Pacto Mundial de las Naciones Unidas respaldó un llamamiento a la acción, COVID-19: Action in the Global Garment Industry (COVID-19: Acción en la industria mundial de la confección): lanzado por la OIT y coordinado por la Organización Internacional de Empleadores (OIE) y la Confederación Sindical Internacional (CSI), que incluye a marcas y fabricantes, trabajadores/as y organizaciones patronales, así como a gobiernos. Algunos ejemplos de otras campañas e iniciativas cuyo objetivo es mejorar los salarios y las condiciones laborales de los/as trabajadores/as del sector textil son ACT, Labour Behind the Label y Fair Wear Foundation.

Los/as trabajadores/as de la industria son vulnerables a unos salarios bajos e inadecuados por varios motivos, entre los que figura la elevada sensibilidad respecto a factores económicos como el precio de la ropa en los mercados de destino y la ausencia de una sólida protección de los derechos laborales en los países productores de prendas en el sudeste asiático. Por otra parte, gran parte del personal del sector textil son mujeres y trabajadoras a domicilio, a las que se les suele pagar menos que a sus compañeros varones.

Recursos útiles


Consideraciones de debida diligencia

En este apartado se describen las medidas de diligencia debida que pueden adoptar las empresas para fomentar salarios dignos en sus operaciones y cadenas de suministro. Los pasos de diligencia debida descritos están alineados con los Principios Rectores de las Naciones Unidas sobre las Empresas y los Derechos Humanos. Se facilita más información sobre los Principios Rectores de las Naciones Unidas en la sección «Marcos clave de diligencia debida en materia de derechos humanos» más adelante o en la Introducción.

Aunque los pasos siguientes ofrecen orientaciones sobre los salarios dignos en particular, suele ser más eficiente en términos de recursos que las empresas «optimicen» sus procesos de diligencia debida en materia de derechos humanos identificando y abordando al mismo tiempo otras cuestiones pertinentes en este ámbito (por ejemplo, trabajo infantil, trabajo forzoso, discriminación y libertad de asociación).

Marcos clave de diligencia debida en materia de derechos humanos

Varios marcos de derechos humanos describen las medidas de diligencia debida que las empresas deberían implementar, en condiciones óptimas, para abordar cuestiones de derechos humanos, incluidos los salarios de miseria. El marco principal son los Principios Rectores de las Naciones Unidas sobre las Empresas y los Derechos Humanos (Principios Rectores). Lanzados en 2011, los Principios Rectores ofrecen orientación sobre cómo aplicar el Marco de las Naciones Unidas «Proteger, respetar y remediar», que establece las responsabilidades respectivas de los gobiernos y las empresas, y dónde se cruzan.

Los Principios Rectores establecen cómo las empresas, en el cumplimiento de su responsabilidad de respetar los derechos humanos, deben aplicar la diligencia debida y otras políticas y procesos relacionados, entre los que se incluyen los siguientes:

  • Una política de acceso público que establezca el compromiso de la empresa con el respeto de los derechos humanos;
  • Evaluación de cualquier impacto adverso real o potencial en los derechos humanos en el que la empresa pueda verse implicada en su cadena de valor;
  • Integración de los resultados de sus evaluaciones de impacto en las funciones/procesos internos pertinentes y adopción de medidas eficaces para gestionarlos;
  • Seguimiento de la eficacia de las acciones de gestión de la empresa;
  • Informar sobre cómo aborda la empresa sus impactos adversos reales o potenciales, y
  • Corrección de impactos adversos que la empresa haya causado o a los que haya contribuido.

Los pasos que se describen a continuación siguen el marco de los Principios Rectores y pueden considerarse un proceso que puede seguir una empresa que desee comenzar a implementar procesos de diligencia debida en materia de derechos humanos.

Por otra parte, las Directrices de la OCDE para Empresas Multinacionales definen los elementos de una conducta empresarial responsable, incluidos los derechos humanos y laborales.

Otro documento de referencia importante es la Declaración Tripartita de Principios sobre las Empresas Multinacionales y la Política Social de la OIT (Declaración EMN), que contiene la orientación más detallada sobre diligencia debida en materia de derechos laborales. Estos instrumentos, que articulan principios de conducta empresarial responsable, se basan en normas internacionales que gozan de un amplio consenso.


El programa acelerador de la ambición de los ODS del Pacto Mundial de las Naciones Unidas aborda una serie de cuestiones de derechos humanos y tiene una ambición específica de los ODS sobre un salario digno. El Acelerador de Empresas y Derechos Humanos del Pacto Mundial de las Naciones Unidas es un programa práctico que guía a las empresas a través de seis etapas hacia el establecimiento de un proceso continuo de diligencia debida en materia de derechos humanos para ayudarlas a pasar del compromiso a la acción en materia de derechos humanos y derechos laborales.

Por otra parte, el SME Compass ofrece orientación sobre el proceso general de diligencia debida en materia de derechos humanos llevando a las empresas a través de cinco fases clave de diligencia debida. El SME Compass se ha desarrollado especialmente para atender las necesidades de las pymes, pero está disponible de manera gratuita y también pueden utilizarlo otras empresas. La herramienta, disponible en inglés y alemán, es un proyecto conjunto del Helpdesk sobre Empresas y Derechos Humanos del Gobierno alemán y de la Deutsche Gesellschaft für Internationale Zusammenarbeit (GIZ) GmbH.

1. Desarrollar una política de compromiso sobre el salario digno

Requisitos de los Principios Rectores

Según los Principios Rectores, una política de derechos humanos debe:

  • «Ser aprobada al más alto nivel directivo» de la empresa
  • «Basarse en un asesoramiento especializado interno y/o externo»
  • Establecer «lo que la empresa espera, en relación con los derechos humanos, de su personal, sus socios y otras partes directamente vinculadas con sus operaciones, productos o servicios»
  • «Hacerse pública y difundirse interna y externamente a todo el personal, los socios y otras partes interesadas»
  • «Quedar reflejada en las políticas y procedimientos operacionales necesarios para inculcar el compromiso a nivel de toda la empresa».


Sobre la base del compromiso y el apoyo de la alta dirección, las empresas pueden desarrollar políticas en materia de salarios dignos que requieran que sus propios/as trabajadores/as, independientemente de su situación laboral, reciban un salario digno y también pueden exigir o alentar a los proveedores a que paguen un salario digno a sus propios/as empleados/as. En algunos países, las empresas pueden comprometerse a convertirse en «empleadores de salarios dignos» y alinear sus políticas y prácticas con las directrices de las autoridades de salarios dignos, como Living Wage Foundation en el Reino Unido o Living Wage for US en los Estados Unidos. Unilever ha sido un empleador «Living Wage» acreditado en el Reino Unido desde 2021, y desde 2015 ha alcanzado su objetivo de pagar un salario digno a todos los/as empleados/as en 2020. Unilever también se comprometió a garantizar que todos los/as trabajadores/as que directamente proporcionan bienes y servicios a Unilever ganen al menos un salario digno o un ingreso digno en el horizonte 2030.

Las políticas de salario digno deben identificarse claramente en los documentos de política públicos para garantizar la transparencia y la rendición de cuentas. Por ejemplo, en 2020, el Grupo L’Oréal asumió dos compromisos respecto a los salarios dignos, que se reflejan en los documentos y programas de políticas (véanse los Estudios de caso).

Las empresas también pueden considerar alinear sus políticas con los compromisos pertinentes de políticas sectoriales o intersectoriales en materia de salarios y beneficios, por ejemplo:

Recursos útiles

  • Pacto Mundial de las Naciones Unidas, Alcanzar la ambición del salario digno: Hoja de referencia y orientación para la aplicación: La SDG Ambition del Pacto Mundial de las Naciones Unidas sobre el salario digno ofrece detalles ilustrativos sobre las medidas que deben adoptarse para aplicar con éxito un programa de salario digno en el sistema de negocio de una empresa y garantizar que el 100 % de los/as empleados/as de toda la organización perciban un salario digno.
  • Ethical Trading Initiative, Base Code Guidance: Living Wagesuna guía paso a paso para mejorar los salarios en las cadenas de suministro, incluida una sección sobre la integración de las políticas sobre salarios dignos en los códigos de conducta y las políticas existentes.
  • Pacto Mundial de las Naciones Unidas-ACNUDH, Guía para las empresas: Cómo desarrollar una política de derechos humanos: guía que ofrece recomendaciones sobre cómo desarrollar una política de derechos humanos y que incluye extractos de las políticas de las empresas que hacen referencia a los salarios e indemnizaciones justos.
  • SME Compass: Proporciona asesoramiento sobre el modo de desarrollar una estrategia en materia de derechos humanos y formular una declaración de política.
  • SME Compass, Declaración de política: las empresas pueden utilizar esta guía práctica para aprender a desarrollar una declaración de política paso a paso. Varios casos de uso ilustran cómo implementar los requisitos.
  • Principios Laborales del Pacto Mundial de las Naciones Unidas, Plan de aprendizaje para promover el trabajo digno en las empresas: este plan de aprendizaje, desarrollado por el Pacto Mundial de las Naciones Unidas y la Organización Internacional del Trabajo, ayuda a las empresas a comprender cada principio laboral y sus conceptos y mejores prácticas relacionados, así como pasos prácticos para ayudar a las empresas a comprender y tomar medidas en una variedad de cuestiones.


2. Evaluar los impactos reales y potenciales en los salarios de los/as empleados/as

Requisitos de los Principios Rectores

Los Principios Rectores de las Naciones Unidas señalan que las evaluaciones de impacto:

  • Variarán en términos de complejidad en función del «tamaño de la empresa, el riesgo de graves consecuencias negativas sobre los derechos humanos y la naturaleza y el contexto de sus operaciones»
  • Deben «abarcar las consecuencias negativas sobre los derechos humanos que la empresa haya provocado o contribuido a provocar a través de sus propias actividades, o que guarden relación directa con sus operaciones, productos o servicios prestados por sus relaciones comerciales»
  • Deben incluir «consultas sustantivas con los grupos potencialmente afectados y otras partes interesadas», además de otras fuentes de información, como las auditorías
  • Debe ser un proceso continuo.

Las evaluaciones de impacto deben analizar los efectos reales y potenciales, es decir, los efectos que ya se han manifestado o que podrían manifestarse. Se diferencia de una evaluación de riesgos, que solo analizaría posibles impactos y que podría no cumplir todos los criterios anteriores.


La evaluación de los efectos reales y potenciales sobre los salarios en las operaciones y las cadenas de suministro puede resultar difícil, ya que un salario digno tiene numerosos impactos tangibles e intangibles que se perciben en gran medida fuera del entorno de trabajo, como la capacidad de los/as empleados/as para pagar la asistencia sanitaria o la educación, posiblemente para varios dependientes. Los regímenes de seguridad social desempeñan un papel esencial en la protección contra los problemas de salud, la pobreza, la desigualdad y la exclusión social. Sin embargo, a menudo están poco desarrollados (en cuanto al alcance o el nivel de prestaciones) en países en los que predominan los salarios muy bajos.

Para realizar una evaluación de impacto sobre los salarios, las empresas deben considerar la adopción de las siguientes medidas:

  • Determinar la definición de salario digno: Como parte de la evaluación de los impactos reales o potenciales en los salarios de los/as trabajadores/as, es importante que las empresas entiendan que el concepto de salario digno difiere de los puntos de referencia comunes en materia de remuneración, como la competitividad externa y los niveles del sector, así como de los principios y procesos subyacentes para determinar los salarios mínimos en muchos países. Este proceso implicará la determinación de los elementos de la remuneración básica y la evaluación de los salarios en comparación con la referencia del salario digno. Por consiguiente, para aplicar con éxito un programa de salario digno es importante disponer de una definición clara de salario digno, así como de una lista de países y categorías de trabajadores/as que se incluirán en el programa.
  • Evaluar la brecha entre el salario básico actual y los salarios dignos: Las empresas deben determinar entonces los niveles salariales actuales de todos los/as trabajadores/as y todos los tipos de contratos (niveles salariales actuales de los/as trabajadores/as a tiempo completo, a tiempo parcial y temporales). Además, deben identificarse los diversos componentes del paquete de remuneración (salarios, prestaciones, protección social del Gobierno o proporcionada por la empresa) y debe realizarse un análisis para determinar qué elementos de la remuneración pueden incluirse en la remuneración que se comparará con el criterio de referencia relativo al salario digno. La evaluación de las brechas entre la remuneración actual y lo que sería un salario digno debería realizarse para los/as empleados/as de cada país en el que operan y, como parte del compromiso de promover un salario digno en las cadenas de suministro, en los países en los que se encuentran los proveedores. En ese caso, las empresas pueden dar prioridad a proveedores clave o que presenten altos riesgos de impacto.

La evaluación debe considerar asimismo las causas y consecuencias de los salarios percibidos por los/as trabajadores/as; por ejemplo, ¿son bajos los salarios debido a prácticas de contratación insostenibles que mantienen bajos los salarios, o a las prácticas del sector y a la falta de incentivos para abordar los salarios bajos? Estas evaluaciones pueden requerir el compromiso y la aportación de interlocutores sociales como sindicatos y representantes de los/as trabajadores/as, así como de grupos de interés y proveedores.

Países como el Reino Unido y los Estados Unidos disponen de cálculos de salario digno nacionales y regionales con los que las empresas pueden alinearse, pero muchos países no disponen de ese dato. En estos casos, las empresas pueden, como primer paso, identificar a un socio externo fiable que proporcione los datos sobre el salario digno en los lugares pertinentes y orientación para pagar a los/as trabajadores/as un salario digno. Organizaciones como la Global Living Wage Coalition (Coalición Mundial por un Salario Digno), BSR, Fair Wage Network (Red de Salario Digno), Fair Wear Foundation (Fundación Ropa Justa) y WageIndicator (Indicador de Salarios) proporcionan datos sobre salarios dignos en varios países y, hasta cierto punto, orientación para la implementación. Algunos ejemplos de organizaciones específicas de cada país son Asia Floor Wage Alliance (Alianza Asiática de Salarios Mínimos)Living Wage Foundation UK (Fundación Salario Digno del Reino Unido), Living Wage New Zealand (Salario Digno Nueva Zelanda) y la MIT Living Wage Calculator (Calculadora de salario digno del MIT).

Por supuesto, no basta con que los/as trabajadores/as perciban, en principio, un salario digno. Esos salarios deben estar protegidos contra deducciones no autorizadas, sanciones excesivas, uso limitado del pago en especie, retraso en el pago y quiebra. De lo contrario, existe el riesgo de que la empresa intente recuperar los logros alcanzados con la introducción de un salario digno. Se trata de una parte fundamental del contexto general que también debe servir de base para la política salarial de la empresa.

Tras esta evaluación, las brechas identificadas entre la escala salarial y el criterio de referencia del salario digno deben abordarse en la operativa del centro mediante un plan de trabajo de ajuste salarial, incluidos los plazos, con el fin de alinear los niveles de remuneración de los/as empleados/as con los de un salario digno; véase el siguiente paso de diligencia debida.

Recursos útiles

  • Pacto Mundial de las Naciones Unidas, Herramienta de análisis de salario digno: esta herramienta en línea gratuita, fácil de usar y estrictamente confidencial ayuda a las empresas a identificar acciones y nuevas oportunidades para proporcionar un salario digno para garantizar que todos/as los/as trabajadores/as, familias y comunidades puedan vivir con dignidad.
  • Pacto Mundial de las Naciones Unidas, The Poverty Footprint — A People-Centred Approach to Assessing Business Impacts on Sustainable Development (La huella de la pobreza. una herramienta de evaluación que permite a las empresas y a los socios de la sociedad civil comprender el impacto empresarial en la pobreza multidimensional. Como herramienta para ayudar a aplicar los ODS, la huella de la pobreza ofrece una visión general integral de los factores que influyen en la pobreza y hace hincapié en la participación de los grupos de interés y la asociación entre las empresas y la sociedad civil como medio para definir estrategias empresariales en favor de los pobres.
  • OIT, Base de datos de leyes sobre condiciones de trabajo: Esta base de datos en línea proporciona información sobre el entorno regulador de las condiciones de trabajo en más de 100 países.
  • OIT, Estadísticas sobre salarios: Una recopilación de datos sobre salarios en diferentes países.
  • IDH, Iniciativa de Comercio Sostenible, Roadmap on Living Wages (Hoja de ruta sobre salarios dignos): una lista de todos los puntos de referencia de salarios dignos reconocidos por la IDH.
  • Ethical Trading Initiative, Living Wages in Global Supply Chains: A New Agenda for Business (Salarios dignos en las cadenas mundiales de suministro: una nueva agenda para las empresas)consejos prácticos para evaluar las repercusiones de los salarios dignos en la cadena de suministro.
  • Verificación de riesgos en materia de RSC: Una herramienta que permite a las empresas comprobar a qué riesgos internacionales de RSE (incluidos los relacionados con los salarios mínimos y los salarios dignos) están expuestas las empresas y qué se puede hacer para gestionarlos. La herramienta proporciona información personalizada sobre la situación local de los derechos humanos, así como sobre cuestiones ambientales, sociales y de gobernanza. Permite a los usuarios filtrar por producto/materia prima y país de origen. La herramienta fue desarrollada por MVO Netherland; la versión alemana está financiada y ejecutada por el Helpdesk sobre Empresas y Derechos Humanos del Gobierno alemán, y la organización UPJ.
  • SME Compass: La Herramienta de evaluación de riesgos proporciona orientación práctica para la clasificación y el establecimiento de prioridades entre los riesgos una vez identificados.
  • SME Compass, Herramienta de análisis de riesgos: esta herramienta ayuda a las empresas a localizar, evaluar y priorizar los riesgos significativos para los derechos humanos y el medio ambiente a lo largo de sus cadenas de valor.
  • SME Compass, Revisión de proveedores: esta guía práctica ayuda a las empresas a encontrar un enfoque para gestionar y revisar a sus proveedores con respecto a los impactos en los derechos humanos.


3. Integración y adopción de medidas sobre el salario digno

Requisitos de los Principios Rectores

Según los Principios Rectores, una integración efectiva requiere que:

  • «La responsabilidad de prevenir [las] consecuencias [de los salarios dignos] se asigne a los niveles y funciones adecuados dentro de la empresa» (por ejemplo, nivel directivo superior, nivel ejecutivo y nivel del consejo);
  • «La adopción de decisiones internas, las asignaciones presupuestarias y los procesos de supervisión permitan ofrecer respuestas eficaces a esos impactos»


Para adoptar medidas sobre los salarios dignos, las empresas deben elaborar un plan de ejecución que aumente los salarios para alcanzar o superar un salario digno. Las medidas concretas pueden incluir las siguientes:

  • Desarrollar procedimientos de gestión interna para su implantación: Tras la evaluación de brechas, las empresas pueden desarrollar procedimientos de gestión interna para la implantación del programa de salarios dignos. Lo ideal sería que el programa de salarios dignos se integrara en procesos y procedimientos que ya existen en la empresa para revisar y establecer niveles de remuneración en todo el mundo. La implantación de un programa de salario digno puede lograrse mediante un proceso centralizado, en el que puede intervenir un grupo de trabajo interdepartamental.
  • Sensibilización: La formación sobre programas de salarios dignos puede garantizar una aplicación eficaz. Los materiales de formación podrán incluir una atención detallada a los procesos e hitos específicos necesarios para la implantación con éxito el programa. Debe incluir la especificación de los departamentos y funciones responsables de recoger y distribuir los datos sobre salarios dignos a los equipos de evaluación, los tiempos y procesos para llevar a cabo la evaluación, el procedimiento para que el equipo de evaluación presente preguntas y comentarios, el marco para crear los planes de ajuste salarial y garantizar los procesos de aprobación relacionados, y el vehículo para informar de los resultados de la evaluación a los grupos de interés internos.
  • Interactuar con los interlocutores sociales en los debates sobre salarios dignos para garantizar la aplicación satisfactoria de un programa de salarios dignos. Las empresas deben colaborar con los sindicatos y reconocer el papel del diálogo social en el proceso de fijación de salarios. Para que el diálogo social sea eficaz, es importante contar con una sólida base de respeto de los derechos fundamentales de libertad de asociación y de reconocimiento efectivo del derecho a la negociación colectiva.

Además de tomar medidas dentro de sus propias operaciones, las empresas pueden tomar las siguientes medidas para promover salarios dignos a través de las cadenas de suministro:

  • Interactuar con los proveedores para trabajar en pos de un aumento de los salarios de los/as trabajadores/as en la cadena de suministro. Algunas empresas han asumido el compromiso de colaborar con sus proveedores para garantizar salarios dignos de los/as trabajadores/as de la cadena de suministro. Una de las estrategias de interactuación con los proveedores que las empresas podrían considerar es ayudar a los proveedores a mejorar su productividad para «compensarles» por los costes laborales adicionales en los que pueden incurrir al pagar salarios dignos. Esto puede incluir adoptar o financiar nuevas tecnologías para mejorar la eficiencia de la producción y poner en práctica nuevas técnicas de producción (por ejemplo, mediante formación).
  • Mejorar las prácticas de compra empoderando y capacitando a los equipos de compras para que adopten prácticas sostenibles que afectarán a la capacidad de sus proveedores para promover el trabajo decente. El compromiso y la colaboración estrechos con los compañeros de compras permitirán comprender mejor las preocupaciones relativas al modo en que las prácticas de compra pueden afectar a los niveles salariales, así como al modo en que las decisiones de compra pueden afectar a los resultados de los/as trabajadores/as en las cadenas de suministro. Deberán cubrirse los elementos técnicos, como la estimación de costes transparente, la estimación de los minutos de trabajo y la determinación de los costes laborales, con el fin de garantizar que las funciones comerciales puedan apoyar eficazmente los compromisos públicos de lograr de un salario digno en la cadena de suministro. La aclaración de las prácticas de compra que pueden aplicarse para apoyar el trabajo conjunto con los proveedores con el fin de elevar los salarios, así como la ordenación, la consolidación y el acortamiento de las cadenas de suministro, pueden resultar cruciales para los esfuerzos en materia de salarios dignos. Por otra parte, las empresas pueden aumentar el apalancamiento con los proveedores mediante compromisos de compra a más largo plazo y la definición de un enfoque de reparto equitativo de los costes.
  • Promover la libertad de asociación y negociación colectiva para ayudar a que los/as trabajadores/as participen en la fijación de niveles salariales dignos. El diálogo social permite a trabajadores/as y empresarios identificar una vía de acceso a un salario digno. Aunque pueden plantearse expectativas contradictorias, el diálogo social puede contribuir a la consecución de un compromiso basado en un aumento gradual, pero continuo, de los niveles salariales. El diálogo social también promueve y protege el cumplimiento efectivo de un salario digno. Esta labor comprende, entre otras tareas, el seguimiento de la implantación de los niveles salariales convenidos mediante un proceso de diálogo social.
    • Cuando la ley no restringe la libertad de asociación y negociación colectiva, una empresa puede trabajar con proveedores y socios comerciales para defender el derecho a organizarse y negociar colectivamente. Un ejemplo de colaboración entre empresas y sindicatos para aumentar los salarios en las cadenas de suministro es la colaboración entre Inditex e IndustriAll en Bangladesh.
    • Cuando las restricciones legales hacen imposible o muy difícil organizar o negociar colectivamente, las empresas pueden optar por establecer mecanismos alternativos (como comités de trabajadores/as en los que los/as trabajadores/as seleccionan a sus representantes) para sus empleados/as y animar a sus proveedores a hacer lo mismo. Los comités de trabajadores/as no cuentan con ninguno de los derechos y protecciones otorgados a los sindicatos y, por tanto, no contribuyen mucho al empoderamiento de los/as trabajadores/as. No obstante, cuando no existe la alternativa de organizarse, la participación de un comité de trabajadores/as, lo más independiente posible del control de la dirección, podría dar voz a los/as trabajadores/as en la definición de salarios dignos.
  • Coordinar esfuerzos con grupos industriales, organizaciones de trabajadores/as y patronales y la sociedad civil para emprender acciones colectivas y abogar por leyes de salario mínimo más estrictas y siempre que sea posible por un salario digno. Algunos ejemplos son la Business for Inclusive Growth Platform (Plataforma de Empresas para un Crecimiento Inclusivo), una coalición liderada por la OCDE, o el trabajo de la Asociación de Trabajo Justo y su reciente carta a las autoridades de Tamil Nadu en nombre de empresas como Ralph Lauren, Gap y VF Corp.

Recursos útiles

  • Pacto Mundial de las Naciones Unidas, Improving Wages to Advance Decent Work in Supply Chains (Mejorar los salarios para promover el trabajo decente en las cadenas de suministro): Este micrositio web interactivo pone de relieve las lecciones aprendidas y las mejores prácticas de empresas y organizaciones para abordar la baja remuneración en las cadenas de suministro, y proporciona directrices sobre medidas concretas que las empresas y sus proveedores pueden tomar para mejorar los salarios a escala mundial. El informe ofrece consejos y estudios de caso sobre la aplicación de un salario digno en todas las empresas.
  • Pacto Mundial de las Naciones Unidas, The Decent Work Toolkit for Sustainable Procurement (Conjunto de herramientas de trabajo decente para unas compras sostenibles): Esta plataforma permite a las empresas, los profesionales de compras y los proveedores desarrollar un entendimiento común sobre cómo promover el trabajo decente a través de decisiones de compra y aumentar los esfuerzos para mejorar las vidas en todo el mundo.
  • OIT, A Methodology to Estimate the Needs of Workers and Their Families (Metodología para estimar las necesidades de los/as trabajadores/as y sus familias): Este documento técnico ofrece una descripción detallada de una metodología que pueden utilizar los investigadores para estimar las necesidades de los/as trabajadores/as y sus familias en diferentes circunstancias nacionales.
  • IDH, The Sustainable Trade Initiative, Better Business Through Living Wage (Mejores empresas mediante salarios dignos)Mejores prácticas y orientación para las empresas sobre la implantación de políticas y prácticas de salario digno con los proveedores, incluida la Matriz salarial de IDH que ayuda a evaluar la remuneración total (incluidos salarios, bonificaciones, efectivo y prestaciones en especie) en relación con las referencias pertinentes de salario digno.
  • Oxfam, Steps towards a Living Wage in Global Supply Chains (Medidas para un salario digno en las cadenas mundiales de suministro): Este documento informativo recoge consejos y medidas para que las empresas implanten el salario digno en sus cadenas de suministro, incluida una tabla de indicadores de autoevaluación.
  • Ethical Trading Initiative, Base Code Guidance: Living WagesOrientación práctica sobre la implantación de salarios dignos en las cadenas mundiales de suministro, incluida la manera de adoptar medidas.
  • Ethical Trading Initiative, Living Wages in Global Supply Chains: A New Agenda for Business (Salarios dignos en las cadenas mundiales de suministro: una nueva agenda para las empresas)una guía práctica para implementar un salario digno en todas las cadenas mundiales de suministro.
  • SME Compass: Ofrece asesoramiento sobre cómo actuar en materia de derechos humanos integrándolos en la empresa, creando e implementando un plan de acción y realizando una revisión de proveedores y desarrollo de capacidades.
  • SME Compass, Identificación de partes interesadas y socios de cooperación: esta guía práctica está destinada a ayudar a las empresas a identificar y clasificar a las partes interesadas y socios de cooperación relevantes.
  • SME Compass, Normas Compass: esta herramienta en línea ofrece orientación sobre a qué prestar atención al seleccionar normas de sostenibilidad o al participar en iniciativas de múltiples partes interesadas. Permite comparar normas e iniciativas con respecto a su contribución a la diligencia debida en materia de derechos humanos y sus posibles limitaciones.


4. Seguimiento del desempeño en materia de salarios dignos

Requisitos de los Principios Rectores

Según los Principios Rectores de las Naciones Unidas, el seguimiento debe:

  • «Basarse en indicadores cualitativos y cuantitativos adecuados»
  • «Tener en cuenta los comentarios de fuentes tanto internas como externas, incluidas las partes afectadas» (p. ej., por medio de mecanismos de reclamación)


El desempeño en materia de salarios dignos se puede supervisar mediante el seguimiento de los salarios pagados a empleados/as y trabajadores/as en las cadenas de suministro en comparación con la cifra de salario digno para el país o la región en la que residen los/as trabajadores/as. Dado que el cálculo del salario digno se basa en indicadores diferentes en diferentes mercados —como el coste de la vida en la región, los impuestos, el coste y la disponibilidad de los servicios públicos—, es esencial que las empresas establezcan procesos para supervisar y actualizar los niveles de los salarios dignos para reflejar estos cambios. Además de los salarios, otros datos de remuneración o retribución son importantes para la evaluación —como primas o beneficios en el lugar de trabajo—, así como el número de horas trabajadas.

La matriz salarial desarrollada por la IDH (Iniciativa de Comercio Sostenible) ayuda a las empresas a evaluar la remuneración total de los/as trabajadores/as, incluidos salarios, primas, efectivo y prestaciones en especie, en relación con las referencias de salarios dignos pertinentes. La huella de la pobreza, una herramienta de evaluación desarrollada por el Pacto Mundial de Naciones Unidas y Oxfam, ofrece información sobre los indicadores al medir resultados en materia de salario digno. Un ejemplo de indicador clave es el seguimiento de la tendencia general de los ingresos en los últimos años en relación con el coste de la vida.

El uso de tecnologías como la analítica de datos y el aprendizaje automático puede ayudar a las empresas a automatizar la brecha en el cálculo salarial sobre la base de datos macroeconómicos evolutivos (por ejemplo, el coste de la vida) y las evaluaciones del cumplimiento en el conjunto de la empresa.

Puede resultar difícil recoger datos sobre salarios pagados en la cadena de suministro, por lo que es importante un compromiso constructivo con los proveedores para garantizar la recogida de datos correctos. Inditex se ha asociado con varias organizaciones, incluida la ACT, para garantizar que el diálogo con los proveedores sea constructivo. H&M también ha trabajado con varias organizaciones para implementar su Estrategia de Salario digno justo. El programa SDG Ambition del Pacto Mundial de las Naciones Unidas sobre el salario digno ofrece una serie de consejos sobre cómo interactuar con los proveedores para garantizar que se recojan datos correctos, se entiendan los impactos y se haga un seguimiento del desempeño.

Recursos útiles

  • Pacto Mundial de las Naciones Unidas, Achieving the Living Wage Ambition: Hoja de referencia y orientación para la aplicación: La SDG Ambition del Pacto Mundial de las Naciones Unidas sobre el salario digno ofrece detalles ilustrativos sobre las medidas que deben adoptarse para aplicar con éxito un programa de salario digno en el sistema de negocio de una empresa y garantizar que el 100 % de los/as empleados/as de toda la organización perciban un salario digno.
  • Pacto Mundial de las Naciones Unidas, The Poverty Footprint — A People-Centred Approach to Assessing Business Impacts on Sustainable Development (La huella de la pobreza. una herramienta de evaluación que permite a las empresas y a los socios de la sociedad civil comprender el impacto empresarial en la pobreza multidimensional. Como herramienta para ayudar a aplicar los ODS, la huella de la pobreza ofrece una visión general integral de los factores que influyen en la pobreza y hace hincapié en la participación de los grupos de interés y la asociación entre las empresas y la sociedad civil como medio para definir estrategias empresariales en favor de los pobres.
  • Ethical Trading Initiative, Base Code Guidance: Living Wagesorientación práctica sobre la implantación de salarios dignos en las cadenas mundiales de suministro, incluidos indicadores clave de desempeño en materia de salarios dignos.
  • Fairtrade, Las personas y el planeta en las empresas: esta guía proporciona a las pequeñas y microempresas las herramientas para iniciar o fortalecer su proceso de diligencia debida en línea con los marcos internacionales.
  • SME Compass: Proporciona asesoramiento sobre cómo medir el desempeño en materia de derechos humanos.
  • SME Compass: Indicadores clave de desempeño para la diligencia debida: las empresas pueden utilizar esta visión general de los indicadores clave de desempeño cuantitativos seleccionados para medir la implementación, gestionarla internamente o comunicarla externamente.


5. Comunicar el desempeño en materia de salario digno

Requisitos de los Principios Rectores

Según los Principios Rectores, las comunicaciones regulares de desempeño deben:

  • «Una forma y una frecuencia que reflejen las consecuencias de las actividades de la empresa sobre los derechos humanos y que sean accesibles para sus destinatarios»
  • «Aportar suficiente información para evaluar si la respuesta de una empresa ante consecuencias concretas sobre los derechos humanos es adecuada»
  • «No poner en riesgo, a su vez, a las partes afectadas o al personal, y no vulnerar requisitos legítimos de confidencialidad comercial»


Se espera que las empresas comuniquen su desempeño en materia de compromisos y políticas de salarios dignos en un informe público formal, que puede adoptar la forma de un informe anual de empresa o RSE, como Schneider Electric, o en un Informe de Progreso anual en la aplicación de los Diez Principios del Pacto Mundial de las Naciones Unidas. Las empresas también pueden optar por compartir información sobre salarios dignos a través de redes sociales y sitios web, como Unilever y Aviva. La información clave compartida suele incluir el porcentaje de trabajadores/as que perciben un salario digno y el estado de las conversaciones sobre salario digno con los proveedores.

Las empresas que forman parte de alianzas o fundaciones de salario digno también pueden comunicar su progreso a través de los canales de la organización, como las empresas del Reino Unido que figuran como empleadores acreditados en el registro de la Living Wage Foundation.

Recursos útiles

  • Principios Rectores – Marco para el Informe: Una breve serie de preguntas inteligentes («Marco para el informe»), directrices de aplicación para las empresas que comunican informes y directrices de aseguramiento para auditores internos y proveedores de aseguramiento externos.
  • Pacto Mundial de las Naciones Unidas, Informe de Progreso:el Informe de Progreso garantiza un mayor fortalecimiento de la transparencia y la rendición de cuentas de las empresas, lo que permite a las empresas hacer un mejor seguimiento del progreso, inspirar liderazgo, fomentar la fijación de objetivos y proporcionar oportunidades de aprendizaje sobre los Diez Principios y los ODS.
  • World Benchmarking Alliance, Social Transformation Framework (Marco de Transformación Social): Este marco evalúa e incentiva a las 2 000 empresas más influyentes para que apoyen la transformación social y establece expectativas sobre derechos humanos, trabajo decente y conducta ética, incluidos los niveles salario digno.
  • Global Reporting Initiative, GRI 401: Empleo: Esta norma aborda el tema del empleo, incluido el enfoque de una organización respecto a la contratación, el reclutamiento, la retención y las prácticas relacionadas, así como las condiciones de trabajo que ofrece. El estándar GRI 401 también incluye el empleo y las condiciones de trabajo en la cadena de suministro de una organización, incluida una remuneración adecuada.
  • El Código de Sostenibilidad: Un marco para la elaboración de informes sobre resultados no financieros que incluye veinte criterios, incluidos los derechos humanos y los derechos de los/as trabajadores/as.
  • Fairtrade, Las personas y el planeta en las empresas: esta guía proporciona a las pequeñas y microempresas las herramientas para iniciar o fortalecer su proceso de diligencia debida en línea con los marcos internacionales.
  • SME Compass: proporciona asesoramiento sobre cómo comunicar los avances en materia de diligencia debida en derechos humanos.
  • SME Compass, Comunicación orientada al grupo objetivo: esta guía práctica ayuda a las empresas a identificar a las partes interesadas y a encontrar formatos y canales de comunicación adecuados.


6. Mecanismos de reparación y reclamación

Requisitos de los Principios Rectores

Según los Principios Rectores de las Naciones Unidas, los mecanismos de reparación y reclamación deben incluir las siguientes consideraciones:

  • «Si las empresas determinan que han provocado o contribuido a provocar consecuencias negativas deben repararlas o contribuir a su reparación por medios legítimos».
  • «El establecimiento de mecanismos de reclamación a nivel operacional para los posibles afectados por las actividades empresariales puede constituir un medio eficaz de reparación, siempre que cumplan ciertos requisitos».

Para garantizar su eficacia, los mecanismos de reclamación deben ser:

  • Legítimos: «suscitar la confianza de los grupos de interés a los que están destinados y responder del correcto desarrollo de los procesos de reclamación»
  • Accesibles: «ser conocidos por todos los grupos interesados a los que están destinados y prestar la debida asistencia a los que puedan tener especiales dificultades para acceder a ellos»
  • Predecibles: «disponer de un procedimiento claro y conocido, con un calendario indicativo de cada etapa, y aclarar los posibles procesos y resultados disponibles, así como los medios para supervisar la implementación»
  • Equitativos: «asegurar que las víctimas tengan un acceso razonable a las fuentes de información, el asesoramiento y los conocimientos especializados necesarios para entablar un proceso de reclamación en condiciones de igualdad, con plena información y respeto»
  • Transparentes: «mantener informadas a las partes en un proceso de reclamación de su evolución, y ofrecer suficiente información sobre el desempeño del mecanismo, con vistas a fomentar la confianza en su eficacia y salvaguardar el interés público que esté en juego»
  • Compatibles con los derechos: «asegurar que los resultados y las reparaciones sean conformes a los derechos humanos internacionalmente reconocidos»
  • Una fuente de aprendizaje continuo: «adoptar las medidas pertinentes para identificar experiencias con el fin de mejorar el mecanismo y prevenir agravios y daños en el futuro»
  • Basarse en la participación y el diálogo: «consultar a los grupos interesados a los que están destinados sobre su diseño y su funcionamiento, con especial atención al diálogo como medio para abordar y resolver los agravios»


Es posible que los/as trabajadores/as observen que no se les paga lo suficiente, que se les retiene el salario o que se se han practicado deducciones no autorizadas o ilegales, por lo que podrían reclamar. Las empresas deben disponer de mecanismos de reclamación para que sus propios/as empleados/as planteen de manera confidencial quejas sobre salarios y también deben exigir a los proveedores que dispongan de su propio mecanismo de reclamación. Algunas empresas facilitan a los proveedores un servicio telefónico para que sus trabajadores/as puedan presentar quejas, mientras que otras recurren a terceros para recabar comentarios de los/as trabajadores/as, por ejemplo, la Ethical Trading Initiative (Iniciativa de Comercio Justo) y la Fair Wear Foundation (Fundación Ropa Justa).

La reparación de los salarios de miseria puede incluir el aumento de los salarios a un salario digno o un pago retroactivo a los/as trabajadores/as por el trabajo realizado con salarios inadecuados.

Recursos útiles

  • Ethical Trading Initiative, Access to Remedy: Practical Guidance for Companies (Acceso a la reparación: guía práctica para empresas): Este documento de orientación explica los componentes clave de los mecanismos que permiten a los/as trabajadores/as presentar reclamaciones y a las empresas ofrecer soluciones.
  • Red del Pacto Mundial en Alemania, Worth Listening: Understanding and Implementing Human Rights Grievance Management (Merece la pena escuchar: entender y aplicar una gestión de reclamaciones en materia de derechos humanos): Una guía para empresas destinada a ayudar a las empresas a diseñar mecanismos de reclamación eficaces en materia de derechos humanos, incluido asesoramiento práctico y estudios de caso. También se ofrece en alemán.
  • SME Compass: proporciona asesoramiento sobre cómo establecer mecanismos de reclamación y gestionar las quejas.
  • SME Compass, Gestión eficaz de las reclamaciones: las empresas pueden utilizar esta guía para diseñar sus mecanismos de reclamación de forma más eficaz, de acuerdo con los ocho criterios de eficacia de los Principios Rectores de las Naciones Unidas, e incluye ejemplos prácticos de empresas.


Casos prácticos

Este apartado incluye ejemplos de medidas adoptadas en materia de salarios dignos en sus operaciones propias y las de sus cadenas de suministro.

Orientación adicional

A continuación se incluyen algunos ejemplos de orientación adicional en materia de salario digno:

  • OIT, Informe mundial sobre salarios 2021: Los salarios y el salario mínimo en tiempos de la COVID-19: Este informe contextualiza los cambios salariales mundiales tras la pandemia mundial y presenta directrices sobre políticas salariales para la recuperación económica y la protección de los/as trabajadores/as.
  • OIT, Guía sobre políticas en materia de salario mínimo: este sitio web ofrece información sobre cuestiones clave de buenas prácticas relacionadas con los salarios mínimos y destaca las diferentes opciones que pueden adoptarse en función de las preferencias nacionales y las circunstancias del país.
  • OIT, La Organización Internacional del Trabajo y el salario digno: Organización Internacional del Trabajo y el Salario Digno (La Organización Internacional del Trabajo y el salario digno: una perspectiva histórica): este documento de investigación revisa los debates históricos relacionados con la adopción del principio de un salario digno entre 1919 y la actualidad.
  • Living Wage Foundation, Los Objetivos de Desarrollo Sostenible y el salario digno: este informe pone de relieve los vínculos entre la consecución de los ODS y el pago de un salario digno, y ofrece orientación a las empresas. El sitio web incluye muchos recursos, principalmente centrados en empresas del Reino Unido.
  • IDH, The Sustainable Trade Initiative, Better Business Through Living Wage (Mejores empresas mediante salarios dignos): este informe ofrece una visión general de las principales acciones que las empresas compradoras deben considerar para cerrar las brechas salariales en las cadenas de suministro y presenta herramientas, consejos y ejemplos.
  • IDH, Roadmap on Living Wages (Hoja de ruta de salarios dignos): esta hoja de ruta trabaja para fortalecer la alineación internacional y construir soluciones tangibles con respecto a los salarios dignos. Proporciona un marco de cinco pasos para que las empresas logren un programa de salario digno.
  • WageIndicator Foundation: Este sitio web funciona como una herramienta en línea actualizada que puede utilizarse como bibliotecas del mercado laboral para trabajadores/as, empresas, gobiernos, círculos académicos y medios de comunicación.
  • SME Compass, Brújula de diligencia debida: esta herramienta en línea ofrece orientación sobre el proceso general en materia de diligencia debida en derechos humanos llevando a las empresas a través de cinco fases clave de diligencia debida.
  • SME Compass, Normas Compass: esta herramienta en línea ofrece orientación sobre a qué prestar atención al seleccionar normas de sostenibilidad o al participar en iniciativas de múltiples partes interesadas. Permite comparar normas e iniciativas con respecto a su contribución a la diligencia debida en materia de derechos humanos y sus posibles limitaciones.
  • SME Compass, Descargas: hay guías prácticas y listas de verificación disponibles para su descarga en el sitio web de SME Compass para integrar los procesos de diligencia debida, mejorar la gestión de la cadena de suministro y hacer que los mecanismos sean más eficaces.
  • Servicio de asistencia de la OIT para empresas, Centro de información nacional: este recurso se puede utilizar para informar sobre la diligencia debida en materia de derechos humanos, proporcionando información específica por país sobre los diferentes derechos laborales.
  • Fairtrade, Las personas y el planeta en las empresas: esta guía proporciona a las pequeñas y microempresas las herramientas para iniciar o fortalecer su proceso de diligencia debida en línea con los marcos internacionales.