Brands Fashion es una empresa de uniformes corporativos. Como parte de una evaluación de riesgos de derechos humanos en curso, identificó los salarios dignos como un problema de riesgo en sus cadenas de suministro de textiles. Junto con Fairtrade, la empresa abordó este problema y se convirtió en la primera empresa del mundo en certificar todas las etapas de una cadena de suministro de acuerdo con el Estándar Fairtrade para la industria textil, incluido el desmotado, el hilado, el tricotado, el teñido, el estampado y la confección de prendas. En este proceso, la empresa contó con el apoyo del Helpdesk on Business & Human Rights, que proporcionó información sobre el enfoque del análisis de riesgos en el marco de una consulta gratuita.
El nuevo Estándar Fairtrade para la industria textil ofrece un enfoque integral para fortalecer los derechos de las personas trabajadoras y mejorar los salarios y las condiciones laborales en la industria textil. Fairtrade utiliza el método Anker para definir un salario digno como un mínimo que satisface las necesidades básicas de los/as trabajadores/as y sus familias y proporciona una vivienda adecuada, alimentos nutritivos y gastos de atención médica, educación, ropa, transporte y ahorros. Con la introducción del estándar, Brands Fashion se ha comprometido a pagar salarios dignos y a ajustar en consecuencia el nivel salarial de unos 1000 personas trabajadoras del sector textil en la India.
Como parte de la implementación del estándar, se realizaron sesiones de formación intensivas a lo largo de toda la cadena de suministro de Brands Fashion para concienciar sobre unos salarios justos e iniciar un cambio positivo. La introducción de salarios dignos en empresas proveedoras se definió en planes de acción concretos. Además, se establecieron representantes de los/as trabajadores/as elegidos democráticamente que reciben formación específica y sirven como puntos de contacto para sus compañeros/as en materia de derechos laborales y sociales. Además de unas condiciones laborales justas, las empresas participantes también deben cumplir con estrictas normas medioambientales.
Durante la implementación del estándar, los mayores desafíos surgieron de la cooperación con las fábricas en la cadena inferior de suministro textil. A menudo, no existen relaciones comerciales directas con estos proveedores y las empresas compradoras individuales tienen poca influencia sobre ellos, ya que su cuota del volumen total de producción suele ser pequeña. Esto dificultó la tarea de convencer a las fábricas proveedoras de las ventajas del ambicioso estándar textil. Además, es necesario un alto grado de confianza y accesibilidad para obtener información sobre los precios de compra, los sistemas internos de nóminas y las políticas locales de seguridad social. Tras mucho trabajo de traducción, visitas sobre el terreno, la mejora de la confianza y conversaciones con la dirección de las empresas proveedoras, finalmente en el año 2021 fue posible certificar todas las fábricas de toda la cadena de suministro bajo el exigente estándar y comprometerlas a aplicar salarios dignos.
Brands Fashion recibió apoyo en la implementación como parte del programa develoPPP de Deutsche Gesellschaft für Internationale Zusammenarbeit (GIZ) GmbH. Con el programa develoPPP, el Ministerio Federal alemán para la Cooperación Económica y el Desarrollo (BMZ) apoya actividades del sector privado con potencial de política de desarrollo.